Por los débiles

Quizás este tema es menos serio de lo que he escrito anteriormente, pero eso no quiere decir que no sea importante y por supuesto lo hago porque necesito hacerlo.

Me apetece daros un consejo, es muy simple, y espero que lo siguáis. Estos últimos días me he fijado en mi vida, detenidamente, he mirado a mi alrededor y me he dado cuenta que la gente esta llena de prejuicios.

Con esto quiero decir, que a las personas le importa demasiado lo que la gente pueda pensar de ellas.

Entiendo, porque lo comparto, que no os guste salir a la calle de cualquier forma, o que te den vergüenzas determinadas actuaciones, y a quien diga que no le importa lo que digan de él lo siento pero os está mintiendo.

El problema surge cuando empieza a preocuparos de forma excesiva, quiero decir, en temas como "no puedo tener amigos que vistan mal, mancharía mi imagen" y cosas por el estilo, dejando claro que para mi no hay personas que vistan mal, simplemente cada persona es un mundo, y lo que a mi me puede parecer horrible a ti te puede parecer precioso.

Este finde semana me han pasado muchas cosas, buenas y otras no tan buenas; pero eso me ha hecho darme cuenta de que estaba totalmente equivocada, ¿Qué más da lo que piensen cuatro tontos de ti?

Sinceramente, el que o la que critique tu forma de actuar tiene un serio problema.
Ahora me dirigo a esas personas que miran por encima del hombro, que cuando pasas por su lado te echan un vistazo despectivo y con las mismas se van.

Personajillos, me dais pena y lo que todavía es más grave, ojala en el mundo dejaran de existir gente como vosotros.

Tengo una teoria, si os habéis fijado normalmente estos marujas de barrio suelen ir siempre a por el más débil para machacarlo aún más, pero es hora de que todos los débiles nos unamos y dejemos de serlo.

Porque en un futuro nosotros seremos los fuertes y ellos serán marujas de barrio, o como mucho tertulianos cutres de televisión.

Hoy me dirigo a vosotros, levantémonos y acabemos con los marujas, que lo único que quieren es ser el centro de atención, y tener un instante de felicidad en sus tristes vidas.

¡AUPA LOS DÉBILES!